El debate se ha instalado en la sociedad. ¿Es conveniente o no el voto a los 16? Los que están en contra argumentarán que todavía no tienen las competencias necesarias para votar, que carecen de conocimientos y que no merecen tener tal responsabilidad. Incluso alegarán que es discutible que se les dé solo el derecho electoral, cuando todavía están privados de casarse (sin emancipación o concentimiento previo) o hasta incluso de obtener una licencia de conducir.
Quienes estan a favor argumentan que es la oportunidad para que los jóvenes, relegados en el aspecto electoral, logren obtener una mayor participación política para la defensa de sus derechos. Además, agregarán que los adolescentes están muy comprometidos con los temas políticos, incluso más que muchos adultos. Llegarán a decir que tienen conocimientos más que amplios para arribar a una conclusión acertada para decidir su futuro.
En definitiva, nos encontramos en una dualidad tan filosa como interesante. Entonces, ¿Deben o no deben votar?
Antes de responder a tan controversial interrogante debemos poner en claro algunos aspectos. Debemos recordar que el 99.9% de las medidas que se toman, se realizan ante el incentivo de un interés, ya sea obtener mayor apoyo electoral y/o algún beneficio económico o social. No me malinterprete, se han logrado grandes y ventajosas cosas a través del juego de intereses (creacion de nuevas escuelas, nuevas obras viales o arquitectónicas, nuevos servicios, etc.) De esta manera, la pregunta se transformaría en la siguiente ¿Qué intereses se ocultan atrás de tan polémica iniciativa? La respuesta se las dejo a ustedes.
Sin embargo, no me quedaré exponiendo solamente los interrogantes, sino que facilitaré algunos datos que servirán para la reflexión. Actualmente, la edad para ejercer el sufragio es de 18 años. Una edad que puede parecer (y posiblemente lo sea) establecida arbitrariamente. ¿Por qué 18 años? Porque es la edad en donde se termina la educación secundaria (se termina la escuela). Lo que significa que el joven ya ha adquirido los conocimientos necesarios según la planificación de estudio. No obstante, muchas personas no terminan de cursar sus años de educación básicos, pero tienen igualdad de derecho electoral (lo cual está perfecto).
El punto a analizar es que, por el hecho de ser obligatoria, la generalidad para decir que una persona terminó de formarse es a los 18 años de edad aproximadamente. El tema es ¿Por qué no a los 16, siendo que ya estan terminando la escuela?
Mi respuesta la baso en la siguiente analogía:
Ustedes saben que cuando te mudás de la casa de tus padres y vivís por tu cuenta (o simplemente cuando vivis con ellos, pero tu relacion es más independiente) comenzás a conocer un mundo nuevo de relaciones (y personas), de esta forma te das cuenta que tu familia estaba un poco "jodida". Cosas que por toda nuestra niñez asumíamos que eran completamente normales, parecen muy extrañas para el mundo y probablemente hayan "jodido" un poco tu visión del mundo. Ya saben, cosas como pensar que es divertido usar un sobrero de papá noel en navidad, andar gritando canciones por toda la casa, hablar con la boca llena o ver a nuestro padre caminando en ropa interior por todos lados.
El punto es que no nos damos cuenta de las cosas que están cerca de nosotros hasta que no estamos algún tiempo lejos de ellas. Al igual de lo que sucede con las extrañas particularidades y matices de nuestras familias, se produce cuando terminamos la escuela.
Cuando terminamos la escuela, nos damos cuenta que un montón de supuestos que manejabamos como inamovibles resultan ser bastante vanos. Nos damos cuenta que conceptos que aprendimos son relativos, que no hay una sola solucion para todo y que el mundo funciona de una manera mucho más compleja.
En cierta forma, la escuela estandarizó nuestro pensamiento a la vez que fuimos cooptados con cierta variedad de ideas sobre el mundo en el que vivimos. Cuando terminamos la educación obligatoria, comenzamos a experimentar el mundo a saborearlo de una manera diferente, de una manera propia.
Ese es el motivo por el cual no creo conveniente permitir el derecho electroral a los 16 años. A los 16 años todavía no desarrollamos nuestros propios pensamientos, o al menos no tenemos la posibilidad de desarrollarlos al máximo, tan solo somos víctimas del rígido ideario escolar que ha sido establecido para nosotros.
El Duende Verde